jueves, 29 de octubre de 2009

Chistes

En el ascensor

Un hombre pequeño va en el ascensor cuando se monta un tremendo negro al lado suyo.. Este mira al hombrecillo y ofreciéndole la mano, le dice:

-2,10 metros, 125 kilos, un pene de 30 cm, dos testículos de 200 gramos cada uno. Cubano. Mi nombre: Dante Lapuerta.
El hombrecillo se desmaya y el hombre negro, sorprendido, le levanta y le despierta abofeteándole. Entonces le pregunta:
-¿Tienes algún problema?
A lo que el hombrecillo le contesta:
-¿Podría repetir despacio lo que ha dicho?
El negro le mira desde arriba y le vuelve a decir:
-2,10 metros, 125 kilos, un pene de 30 cm, dos testículos de 200 gramos cada uno. Cubano. Mi nombre es Dante Lapuerta.
-Gracias Dios mío, pensé que había dicho 'Date la vuelta'.

-----------
De turismo

Un hombre que hace años vive en el exterior, decide llamar a su familia como todos los meses para saludar y ver como andan, atiende su hermano: – Hola Jorge!, ¿cómo andás? – Bien, Miguel, que bueno que llamaste. ¿Y vos?

- Muy bien, gracias. Che… ¿todo bien allá?

- Si, si, todo bien.

- ¿Alguna novedad?

- No, se murió el gato, nomás.

- Ay, pero bestia!… ¿Cómo me lo decís así?, yo que quería tanto a ese gato… hubieras hecho lo siguiente, para “suavizar” la noticia: el primer mes que te llamo, me decís que el gato está en el tejado (por ejemplo); al segundo mes, me decís que se cayó y que se quebró una patita; al tercer mes, me decís que lo van a operar y que los médicos dicen que hay pocas posibilidades de que sobreviva; y al cuarto mes recién me decís que el pobrecito murió. Pero no así de golpe, bestia. ¿Entendiste?

- Si, Miguel… perdoname.

- Ay, que barbaridad. ¿Y mamá cómo anda?

- Está en el tejado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario